El mundo del reciclaje y la ecología cada vez es más importante dentro del terreno industrial, precisamente por ello, son muchas las máquinas que pueden utilizarse para llevar a cabo este proceso, dependiendo siempre del tipo de producto que quiera reciclarse y sus características.

En la actualidad, cuando se habla de ecología, es importante tener en cuenta lo que se conoce como las tres R, o lo que es lo mismo, reducir, reutilizar y reciclar. Precisamente este último concepto es uno de los que ha cobrado mayor importancia hoy en día y es por ello que, se han ido creando máquinas específicas para poder realizar esta tarea de la mejor manera posible. 

Hay que decir que la maquinaria de reciclaje industrial debe contar con unas características concretas, en función del tipo de producto que se va a tratar, al igual que debe estar preparada para poder prensar grandes cantidades de residuos y basura.

¿En qué consiste una máquina de reciclaje?

Se trata de un dispositivo, generalmente de grandes dimensiones, a través del cual se automatiza el proceso de reciclaje, en función de los diversos residuos que se vayan a tratar. Si bien hay máquinas más pequeñas que se pueden utilizar en las viviendas, las más interesantes son aquellas de origen industrial, utilizadas mayoritariamente por empresas y grandes multinacionales.

Este tipo de máquinas industriales son bastante eficientes, a la par que muy productivas y ayudan a tener un mayor ahorro de energía. Hoy en día, son varios los tipos que se pueden encontrar en el mercado.

Maquinaria de reciclaje más utilizada

Como ya se ha mencionado, son muchos los tipos de maquinaria de reciclaje industrial que existen hoy en día en el mercado, no obstante, para hablar de ellas es importante saber que la clasificación principal es de cuatro tipos. Si bien cada una cuenta con características específicas y trata a residuos concretos, hay una cosa que todas tienen en común y es que, para su correcto funcionamiento y garantizar la mayor seguridad, es esencial contar con expertos en reciclaje industrial que estén especializados en el uso de cada una de estas máquinas.

Compactadoras

Se trata de una de las máquinas más utilizadas hoy en día, puesto que permiten llevar a cabo diversas acciones en muy poco tiempo. Así, gracias a ellas, las industrias tienen la posibilidad de aplastar los residuos, dándole una forma más compacta para su posterior reciclaje.

Por norma general, este tipo de máquinas se utilizan para prensar materiales como el aluminio, el cartón o el plástico, aunque también existen algunos modelos específicos con los que hacer lo propio con residuos orgánicos.

Suelen ser máquinas de gran rendimiento y muy productivas.

Retrocompactadoras

En este caso, su mayor diferencia con respecto a las anteriores es que las retrocompactadoras llevan a cabo todo el proceso de manera automática. Sabiendo además que se encargan principalmente de prensar tanto los residuos orgánicos como los inorgánicos.

Hay que decir que son máquinas bastante ventajosas, debido a que cuentan con una gran autonomía y potencia, permitiendo que se pueda cargar de manera continuada y sin apenas hacer ruido.

Además de los residuos mencionados, estas máquinas sirven para compactar materiales como las cajas, plásticos, aluminio y cartón.

Prensas verticales

Tal y como su nombre indica, este tipo de maquinaria sirve para poder prensar los residuos, con el fin de poder reutilizarlos posteriormente. Suelen ser máquinas que consumen poca energía, más pequeñas que las anteriores y no emiten demasiado ruido, además de ser algo más económicas.

Dependiendo de lo que se quiera prensar, así se puede elegir entre varios modelos específicos. De esta manera, hay prensas exclusivas para las latas y botellas; otras dedicadas solamente a la basura; también están las conocidas como multicajón; y las hidráulicas.

Prensas horizontales

Al igual que ocurre con las anteriores, las prensas de reciclaje horizontal también permiten automatizar los procesos, si bien, se diferencian de las verticales en que suelen ser más grandes y, por tanto, las industrias deben establecer un lugar concreto para su instalación.