La masiva fabricación de neumáticos y las dificultades
para hacerlos desaparecer, una vez usados, constituye uno de los más
graves problemas medioambientales de los últimos años
en todo el mundo. Un neumático necesita grandes cantidades
de energía para ser fabricado -medio barril de petróleo
crudo para fabricar un neumático de camión- y también
provoca, si no es convenientemente reciclado, contaminación
ambiental al formar parte, generalmente, de vertederos incontrolados.
Existen métodos para conseguir un reciclado coherente de estos
productos pero faltan políticas que favorezcan la recogida
y la implantación de industrias dedicadas a la tarea de recuperar o eliminar, de forma limpia, los componentes peligrosos de las gomas
de los vehículos y maquinarias.
- En España
se generan cada año 250.000 toneladas de neumáticos
usados.
- El 45% se deposita en vertederos controlados sin tratar,
el 15% se deposita después de ser triturado y, el 40% no
está controlado.
- Para eliminar estos residuos se usa con frecuencia la quema
directa que provoca graves problemas medioambientales ya que produce
emisiones de gases que contienen partículas nocivas para
el entorno, aunque no es menos problemático el almacenamiento,
ya que provocan problemas de estabilidad por la degradación
química parcial que éstos sufren y producen problemas
de seguridad en el vertedero.
- Las montañas de neumáticos forman arrecifes
donde la proliferación de roedores, insectos y otros animales
dañinos constituye un problema añadido. La reproducción
de ciertos mosquitos, que transmiten por picadura fiebres y encefalitis,
llega a ser 4.000 veces mayor en el agua estancada de un neumático
que en la naturaleza.
En la actualidad se pueden utilizar diversos métodos para
la recuperación de neumáticos y la destrucción
de sus componentes peligrosos. El sistema de tratamiento puede convertir
los neumáticos en energía eléctrica.
Termólisis
Se trata de un sistema en el que se somete a los materiales de residuos
de neumáticos a un calentamiento en un medio en el que no
existe oxígeno. Las altas temperaturas y la ausencia de oxígeno
tienen el efecto de destruir los enlaces químicos. Aparecen
entonces cadenas de hidrocarburos. Es la forma de obtener, de nuevo,
los compuestos originales del neumático, por lo que es el
método que consigue la recuperación total de los componentes
del neumático. Se obtienen metales, carbones e hidrocarburos
gaseosos, que pueden volver a las cadenas industriales, ya sea de
producción de neumáticos u a otras actividades.
Pirolisis
Aun está poco extendido, debido a problemas de separación
de compuestos carbonados que ya están siendo superados. Según
los datos de la empresa Chemysis SA.
Este procedimiento (fabrica piloto) está operativo en Taiwán
desde 2002 con cuatro líneas de pirolisis que permiten reciclar
9000 toneladas / año. En la actualidad el procedimiento ha
sido mejorado y es capaz de tratar 28.000 toneladas de neumáticos
usados/año, a través de una sola línea.
Los productos obtenidos después del proceso de pirolisis
son principalmente: Gas similar al propano que se puede emplear
para uso industrial / - Aceite industrial liquido que se puede refinar
en Diesel. / Coke / Acero.
Incineración
Proceso por el que se produce la combustión de los materiales
orgánicos del neumático a altas temperaturas en hornos
con materiales refractarios de alta calidad. Es un proceso costoso
y además presenta el inconveniente de la diferente velocidad
de combustión de los diferentes componentes y la necesidad
de depuración de los residuos por lo que no resulta fácil
de controlar y además es contaminante. Genera calor que puede
ser usado como energía, ya que se trata de un proceso exotérmico.
Con este método, los productos contaminantes que se producen
en la combustión son muy perjudiciales para la salud humana,
entre ellos el Monóxido de carbono - Xileno Hollín
- Óxidos de nitrógeno, Dióxido de carbono -Óxidos
de zinc Benceno - Fenoles, Dióxido de azufre - Óxidos
de plomo, Tolueno. Además el hollín contiene cantidades
importantes de hidrocarburos aromáticos policíclicos,
altamente cancerígenos. El zinc, en concreto, es particularmente
tóxico para la fauna acuática. También tiene
el peligro de que muchos de estos compuestos son solubles en el
agua, por lo que pasan a la cadena trófica y de ahí
a los seres humanos.
Trituración mecánica
Es un proceso puramente mecánico y por tanto los productos
resultantes son de alta calidad limpios de todo tipo de impurezas,
lo que facilita la utilización de estos materiales en nuevos
procesos y aplicaciones. La trituración con sistemas mecánicos
es, casi siempre, el paso previo en los diferentes métodos
de recuperación y rentabilización de los residuos
de neumáticos.
Neumáticos convertidos en energía eléctrica
Los residuos de neumáticos una vez preparados, puede convertirse
también en energía eléctrica utilizable en
la propia planta de reciclaje o conducirse a otras instalaciones
distribuidoras. Los residuos se introducen en una caldera donde
se realiza su combustión. El calor liberado provoca que el
agua existente en la caldera se convierta en vapor de alta temperatura
y alta presión que se conduce hasta una turbina. Al expandirse
mueve la turbina y el generador acoplado a ella produce la electricidad,
que tendrá que ser transformada posteriormente para su uso
directo.
Usos tras el reciclado
Los materiales que se obtienen tras el tratamiento de los residuos
de neumáticos, una vez separados los restos aprovechables
en la industria, el material resultante puede ser usado como parte
de los componentes de las capas asfálticas que se usan en
la construcción de carreteras, con lo que se consigue disminuir
la extracción de áridos en canteras. Las carreteras
que usan estos asfaltos son mejores y más seguras.
Pueden usarse también en alfombras, aislantes de vehículos
o losetas de goma. Se han usado para materiales de fabricación
de tejados, pasos a nivel, cubiertas, masillas, aislantes de vibración.
Otros usos son los deportivos, en campos de juego, suelos de atletismo
o pistas de paseo y bicicleta. Las utilidades son infinitas y crecen
cada día, como en cables de freno, compuestos de goma, suelas
de zapato, bandas de retención de tráfico, compuestos
para navegación o modificaciones del betún.
El Instituto de Acústica del CSIC ha desarrollado un proyecto
para la utilización de estos materiales en el aislamiento
acústico. El interés en la utilización de un
material como el caucho procedente de los neumáticos de desecho
para material absorbente acústico se centra en que requiere,
en principio, sólo tratamientos mecánicos de mecanizado
y molienda. Estos tratamientos conducen a un producto de granulometría
y dosificación acorde con las características de absorción
acústica de gran efectividad.
Fuente: www.enbuenasmanos.com
ENLACES RECOMENDADOS
SIGNUS ECOVALOR. Entidad gestora del sistema integrado de neumáticos usados.
Reciclado y disposición final de los neumáticos.
El reciclaje de neumáticos usados. |